Esta ruta es una de la habituales para ascender a la cumbre del Ocejón: partir de Majaelrayo, subir a la Peña Bernardo y tras alcanzar el collado Perdices continuar por la cresta cimera hasta el Ocejoncillo, desde donde un último esfuerzo nos conducirá hasta los 2.048 m del Ocejón.
En el descenso se seguirá el itinerario usual para llegar a Valverde de los Arroyos, pasando por encima de la Chorrera de Despeñaelagua.
29€ por persona
25€ Socios
Cada grupo está compuesto por un máximo de 10 participantes. De no llegarse al mínimo de 4 participantes por día la actividad se anularía avisando a las personas que lo han reservado con una antelación mínima de 3 días.
El ratio siempre será de 1 Guía /10 participantes.
Se considera reservada la plaza una vez ingresado el 100 % del importe de la actividad.
Incluye:
-Seguro de accidentes y guías.
-Guía de Montaña-Titulado
No incluye:
-Transporte
-Comidas y bebidas.
Valores naturales
El Ocejón se compone de pizarras y cuarcitas, que entre Majaelrayo y Peña Bernardo se cubren de rebollos. Conforme se asciende el roble desaparece para dejar paso al brezo y la gayuba. La loma meridional que culmina en el Ocejón es un ejemplo de cresta pizarrosa, con desplomes importantes hacia ambas vertientes. En el descenso destaca la Chorrera de Despeñaelagua, cuyo origen es fruto de un plegamiento de cuarcitas, que al levantarse crearon un escalón, por el que se precipitan las aguas.
Valores culturales
El Ocejón es una de las cumbres más simbólicas del Sistema Central, y por supuesto del macizo de Ayllón. Para los alcarreños es su cumbre más emblemática, a pesar de no ser la más alta de la provincia, honor que recae en el Lobo. Son numerosas las leyendas que se han desarrollado en torno a esta cumbre, tan representativa para los guadalajareños. Además, tradicionalmente el Club Alcarreño de Montaña coloca un Belén, todos los años, por Navidad.
El macizo de Ayllón, al ubicarse fuera de las rutas de comunicación habituales, ha conservado gran parte de su caracter rural. Hay que destacar su arquitectura negra, basada en el uso de la pizarra como elemento constructivo. Esta "arquitectura sin arquitectos" o "arquitectura tradicional" se relaciona intimamente con el medio natural en el que se desarrolla, adaptándose al entorno y al paisaje con soluciones constructivas originales y funcionales.
La arquitectura negra del norte de Guadalajara aprovecha los materiales más inmediatos, como la pizarra para los tejados y la cuarcita para los muros, distinguiendose varias zonas en función de las soluciones aportadas. Hoy valoramos la belleza de casas, tainas y tenadas "negras" que, en un pasado inmediato y para los lugareños, fueron simplemente la solución a sus problemas de vivienda y de trabajo.
Botas de montaña. Pantalones de senderismo, forro polar y chaqueta para la lluvia. Preferiblemente chaqueta de Gorotex o tejidos similares. Guantes, gorro y gafas de Sol. Mochila pequeña 25l mínimo con botella de agua de 1,5 litros, crema solar protectora y ropa de sustitución.
